Hace poco había tenido un día largo de trabajo y al llegar a casa me dice mi compañero:
-
Ey, llegas tarde!
Yo me quedé un poco como pensando en que no lo podía remediar y que aquello no era ninguna cita. El caso es que tras recapacitar un momento me encantó, hacía mucho que nadie me decía algo así al llegar a casa. Es bonito saber que alguien te espera en lo que consideras tu hogar.
Pues yo esta noche he soñao contigo.
ResponderEliminar